¿Cómo lavar los abrigos en la lavadora sin dañarlos?

A medida que se acerca la estación fría, los abrigos se vuelven más importantes. Cada año, cuando revisamos el guardarropa, los encontramos un poco sucios y empolvados. Saber cómo lavar un abrigo es muy importante y aquí te enseñamos como hacerlo.

En estos meses de frío, los abrigos son nuestro mejor aliado para combatir las bajas temperaturas y, si bien no son prendas que requieran un lavado regular, sí que es verdad que, al menos una vez al año, debemos lavarlas. Ahora bien, para hacerlo no es necesario, en la mayoría de los casos, llevar los abrigos a la tintorería ya que teniendo en cuenta una serie de consejos podemos lavarlos en casa y obtener muy buenos resultados. 

Y es que, aunque parezcan prendas muy delicadas, la mayoría de los abrigos permiten utilizar la lavadora siempre que usemos un tipo de lavado adecuado para cada tejido o el detergente correcto.

Cómo lavar los abrigos en casa:

Es recomendable utilizar un ciclo muy suave y con agua fría (o una temperatura máxima de 30 grados). En la mayoría de las lavadoras ya hay programas específicos para prendas delicadas que nos serán muy útiles para los abrigos. Y, antes de introducirlo en la lavadora, es necesario pasar un rodillo para quitar todas las pelusas del abrigo y darles la vuelta para lavarlo del revés. Una vez lavado, los expertos recomiendan extender el abrigo y guardarlo en una funda de tela sin cerrar para que no acumule humedad mientras se seca.

Cómo lavar abrigos de lana en la lavadora sin dañarlo:

La lana es una fibra natural por lo que hay que tener cuidado al lavarla. Se recomienda lavar a manos los abrigos tejidos de lana o en un ciclo muy suave y con agua fría. Desde Siemens, recomiendan que la temperatura máxima del lavado sea de 30ºC, pero antes debemos:

1. Pasar un rodillo para quitar las pelusas del abrigo.
2. Darle la vuelta al abrigo antes de introducirlo en la lavadora.
3. Seleccionar un programa específico para prendas delicadas. En algunas lavadoras, hay un programa exclusivo para prendas de lana.
4. Y por último, una vez limpio hay que extender el abrigo y guardarlo en una funda de tela sin cerrar para que transpire mientras se seca. Así no acumulará humedad.